FERIA DE VERA 2023

Carlos Láinez Núñez tación era pequeña y cuadrada, por lo que el escritorio no estaba a más de tres pasos del balcón; a la derecha de Esteban, sentado en la silla de la mesa, había una estantería repleta de libros viejos y al lado contrario una puerta de roble pardo engarzado en bisagras de acero negro. Esteban se releía por tercera vez ese mes, un libro sobre cómo los Reyes Inmaculados se hicieron con Leonesia hace más de doscientos años, quizás para evadirse del dolor. Esteban sabía de sobra cómo acaba el libro, con las palabras “y siguen reinando hasta nuestros días”. El cro- nista debía actualizarla; seguía vivo. Colgados a los lados de la puerta, en las paredes blancas, hubo un par de tapices que mostraban a los Reyes Inmaculados de hoy en día, al Rey Lorenzo, en uno, y en otro a la Reina Leo- nora, pero cuando Leonardo conquistó la capital hace cinco días los tuvo que quitar. Cerró el libro de golpe y se asomó al balcón. El suelo del patio estaba bastante lejos, hecho de losas anaranjadas que contrastaban con las tejas rojas de la casa; en él había barriles, trabajadores de sus socios (que no tenían más lazos con Esteban más que acordar asuntos) transportando cajas, sacos y jarrones. En un pequeño estanque artificial, definido por unas paredes bajas incoloras y que era alimentado por cuatro finos tubos, tres lavanderas lavaban las ropas de seda cara. La fila de empleados iba del porche de la puerta de entrada a una portilla a una esquina del no muy grande patio. Veía desde el balcón la reconocible punta del gorro púrpura en forma de huevo de su socio Narciso, el cual estaba hablando con un hombre de jubón azul, barba gris y esponjosa, y capa verde clara como un limón por madurar. -¡Buenos días, Don Esteban!- dijo Díaz al levantar la cabeza y mirar hacia arriba junto a su compañero. Le llama- ban Don, pero no era ningún señor. Era solo hijo de una campesina, pero rico. Fragmento del I Capítulo de “Los Rebeldes del Reino: Una Corona de Mentiras” NARRATIVA Feria de Vera 2023 79